Un año más tarde...

El tiempo ha pasado volando y me impresiona ver como han cambiado las cosas. Como has pasado de ser un simple conocido, un compañero de clase, a alguien tan importante en mi vida. A alguien a quien quiero tanto.

Si no quieres llamarlo aniversario porque te suene raro, no lo llames así, pero igualmente te tengo que felicitar por soportarme todo un año (eso tiene mérito).

Hay muchas cosas que me gustan de ti, que te hacen interesante, y una persona maravillosa. Más aún de lo que puedas imaginarte.
Créeme, eres muy especial para mí, y quiero que no lo olvides.

Nunca he tenido una relación así con nadie y a veces no se cómo es normal actuar, pero realmente durante este año solo he tenido que guiarme por lo que me apeteciese en cada momento y, créeme, que con muy pocas personas me consigo sentir tan bien y tan a gusto como contigo.

Contigo siento que puedo ser yo misma, que puedo decir pegos, hacer el tonto, ponerme cariñosa o desesperante (a veces), incluso hablar sola y que no me juzgues (demasiado).

Siento que me quieres por como soy y por quien soy, y eso me impresiona más que nada. El afecto y cariño que noto entre nosotros me parece una sensación maravillosa.
Y solo puedo agradecerte una y mil veces que estés siempre ahí; para cuando me siento mal y cuando me siento bien. Siempre estás ahí.

Por todo esto, por todos los "buenas noches", por todos los momentos que me has dado este año y por muchísimas cosas más, te quiero.

Y espero, que este haya sido el primer año de muchos.