Un silencio que cala en lo más hondo se apodera de mí.
La verdad es que no lo se, nadie lo sabe.
Para mí solo hay una respuesta clara: INSOMNIO.
Insomnio mientras pienso en lo que pueden significar nuestras conversaciones. Insomnio mientras sonrío recordando todas tus palabras, llenas de amabilidad y ese qué-se-yo más. Insomnio mientras quiero que esto sea verdad, y a la vez me muero de miedo por no saber cómo reaccionar ni si quiero algo más. Miedo y deseos que me quitan el sueño.
A partir de medianoche es cuando mejor se piensa, nadie te ve, nadie te escucha y tienes una laarga noche por delante para simplemente no dormir.
Luego, el cansancio es real, pero lo repetirás noche tras noche.
Posdata: Y es que esas noches las estrellas brillan más que nunca solo para ti.
No hay comentarios:
Publicar un comentario